La palabra de moda este año es Bioestimulantes, pero ojo no son todos iguales
Según explica el Ing. Ubaldo Estanga, Responsable de desarrollo e investigación de Nitrap, “la aceptación del producto biológico está cada vez más avanzada, son tecnologías que abren un nuevo abanico de posibilidades. Años atrás no se trabajaba con promotores de crecimiento pero la demanda cambió hace 4 años y viene creciendo. Hoy muchos productores buscan tratamientos de semillas con promotores de crecimiento y biocontroladores, etc. Pero claramente la palabra de moda este año es Bioestimulantes, pero ojo no son todos iguales”.
“Este tipo de productos irrumpieron en los últimos meses pero tenemos que saber diferenciar a cada uno. Varían si son de origen vegetal, animal, fertilizantes foliares, etc. Cada empresa debe tener sus productos testeados, sin son bioestimulantes, deberían comunicar que aminoácidos tiene en la etiqueta. Muchos los posicionan como anti estrés o para determinada etapas del ciclo del cultivo, pero lo cierto es que se puede ser mucho más preciso, mucho más fino, en detallar cómo funcionan en la planta y en el suelo” sostiene.
“En otros países de Latam hay conciencia del uso correcto de este tipo de producto que en Argentina a veces se desdibuja. Los fertilizantes foliares, algas, muchas veces se mezclan sustancias sin resultados claros. La oferta de Bioestimulantes es lo que más ha crecido en los últimos tiempos pero insisto en que hay que probar y medir antes de vender. Los Bioestimulantes de Nitrap se destacan por ser productos para planteos con certificación orgánica: Por ejemplo, Biotrap está elaborado con bacterias del género Bacillus spp. Es un promotor del crecimiento de plantas tanto de la parte aérea como radicular. Logra un sistema radicular más vigoroso que conduce a una mejor absorción de agua y nutrientes que sumada al efecto de biocontrolador ofrece una mayor resistencia frente a las enfermedades. Este producto se recomienda en mezcla con algún fungicida. Tenemos ensayos con INTA Pergamino que señalan que reduce la mitad de la dosis del fungicida y hace efecto de sinergia porque el bacillus queda en la superficie de la hoja y tiene un efecto erradicante de patógenos”.
“Otros de los productos que diseñamos es Tricotrap, un bio fertilizante orgánico elaborado con Trichoderma harzianum. Un hongo que estimula el crecimiento de los cultivos, porque posee metabolitos que promueven los procesos de las plantas. A su vez actúa como agente de control biológico sobre patógenos fúngicos del suelo, principalmente de los géneros Pythium, Fusarium, Phytophthora, Rhizoctonia y Sclerotium, entre otros. Este producto se aplica también en semillas con dos formulaciones, una líquida para semilla y otra para aplicaciones foliares. La aplicación de Trichoderma foliar viene creciendo en demanda y Nitrap está enfocada en lograr un combo soluble de Trichoderma con alto contenido de conidio”.
“Por último tenemos Nitrapfol Amino ZnB. Es un fertilizante natural elaborado a base de extractos vegetales y los micronutrientes Zinc y Boro. Puede ser aplicado en una amplia gama de cultivos, también contiene nitrógeno de origen vegetal no ureico siendo particularmente ventajoso en aquellos cultivos Sus extractos de vegetales son fuentes de aminoácidos que ayudan a regular los procesos de germinación, brotación, floración y desarrollo. Cuando es aplicado en fertirriego, beneficia la estimulación de la microflora bacteriana del suelo y posee efecto quelante sobre los micronutrientes que provoca una mejor aireación y estructura. También funciona como auxiliar de los herbicidas ya que ayuda a la detoxificación de la planta. Trabajamos con muchos convenios con INTA, Universidad de Córdoba, UNR y eso también nos permite aprender sobre la viabilidad de los productos para afinar la recomendación” afirma.
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